sábado, 28 de noviembre de 2009

LA MACARENA DE LUTO POR JOSELITO

Joselito vistiendo la túnica de la Hermandad de la Macarena.

Magnífico fotomontaje de Macareno 40.

La Esperanza Macarena de negro por la muerte de su torero.

1920. La Macarena de luto a la muerte de José Gómez Ortega, Joselito (no confundir, con cierto torero madrileño, José Miguel Arroyo, que también se apodaba Joselito, pero que para Sevilla siempre fue Pepito)

Terminan las últimas hojas del calendario de noviembre, el otoño se va retirando para dejar paso al invierno, pero antes de que se termine este mes, quiero traeros estas fotos, que no por conocidas dejan de ser espectaculares. Son las conocidas estampas de la Virgen de la Esperanza Macarena vestida de negro por la muerte de uno de sus hermanos y devotos más ilustres, el torero José Gómez Ortega, más conocido como Joselito El Gallo o Gallito.

La muerte de Joselito fue un impacto para su Hermandad, para la afición y el mundo taurino y para toda la ciudad, pero estas fotos se reprodujeron con tanta saciedad que pronto ocuparon su lugar en multitud de capillas particulares de toreros y artistas.

Mi abuelo Pepe, gallista declarado, siempre tuvo una en su casa-taller de Mateos Gago 25, por lo que desde mi más tierna infancia esta estampa me fue muy familiar. A pesar de ello, aún me sigue sorprendiendo la belleza de la Esperanza en la estrema sencillez. Cómo dice Pilar, de hebrea, con cuatro trapos y una aureola estrellada es cuando más bella la encuentro.

Y me sigue llamando poderosamente la atención la sensibilidad que nuestro entonces director artístico y prioste, Juan Manuel Rodríguez Ojeda, mostró para con su amigo, al que le levantó un fastuoso catafalco en la Parroquia de San Gil como si de una gran dignidad se tratara.

Queda también para el recuerdo, la bella letra que el trío Quintero-León-Quiroga compusieron sobre la muerte del torero macareno, que popularizara la dama macarena de la copla, Juana Reina.


Silencio por un torero

(Quintero-León-Quiroga)

Aquella tarde Sevilla
se puso toda amarilla
quebraíta de color.
Y por el aire caliente
su voz clamó de repente
hay que pena y qué dolor.
Silencio en Andalucía,
rezadle un Ave María
y quitarse los sombreros.
Silencio el patio y la fuente,
que está de cuerpo presente
el mejor de los toreros.

"¡Parece que está dormío,
Dios mío,en su capote de brega!"
Y por Gelves viene el río, teñío,
con sangre de los Ortega.
Suspira bajo su velo
la Virgen de la Esperanza
y arría en señal de duelo
banderas la Maestranza.
Y Sevilla, enloquecida,
repetía a voz en grito:
"¡Pá que quiero mi alegría!
¡Pá que quiero mi alegría,
si se ha muerto Joselito!

"Silencio por un minuto,
pintad los campos de luto
el ciprés y el olivar.
De luto las amapolas
de luto Carmen y Lola
Concha, Pepa y Soledad.
Silencio guarda el romero
silencio el torito fiero
y los bravos mayorales.
Crespones en las divisas
silencio pide la brisa
al pasar por los trigales.

"¡Parece que está dormío,
Dios mío,en su capote de brega!
"Y por Gelves viene el río,
teñío,con sangre de los Ortega.
Suspira bajo su velo
la Virgen de la Esperanza
y arría en señal de duelo
banderas la Maestranza.
Y Sevilla, enloquecida
repetía a voz en grito:
"¡Pá que quiero mi alegría!
¡Pá que quiero mi alegría,
si se ha muerto Joselito!"

(Fotos by Macareno 40, rincondelrabo y el galeón)

jueves, 26 de noviembre de 2009

NOVIEMBRE, MES DE LOS DIFUNTOS

D. Eduardo Maestre interpretando uno de sus sonetos en la Plaza de Santa Marta. Al fondo, la triada capitolina del Bosco, Dani-Pollo, Dutti y un servidor.

Desde que era pequeño me enseñaron que el mes de noviembre era un mes especial dentro del calendario anual. En las previas a la celebración de la Navidad, fiesta entrañable y familiar sobre todas las cosas, había unos momentos de recogimiento, para acordarnos de nuestros familiares y seres queridos que ya no se encuentran con nosotros.

Es el mes de noviembre un mes de cultos a las Ánimas Benditas del Purgatorio por parte de las Hermandades Sacramentales, de misas de difuntos en nuestras Hermandades por los hermanos fallecidos y de la ritual visita al cementerio, para limpiar las tumbas de nuestros familiares y llevarles unas flores. Y, aunque esencialmente esta última costumbre no solo se practica en este mes, es cierto que parece indisoluble la referencia del mes de noviembre con el recuerdo a los difuntos.

Tan bien es el mes en el que en los teatros se repone la obra que el genial Zorrilla dedicó a unos de los mitos por excelencia de Sevilla, "Don Juan Tenorio". Si aún no han asistido a la representación que la compañía de Teatro Clásico de Sevilla realiza en la Iglesia de San Luis de los Franceses, es el momento de hacerlo; una explosión de sensaciones invadirán sus sentidos.

Es indudable el marcado carácter religioso que en nuestra ciudad tiene este mes, acrecentado con las procesiones de Tosantos y la Virgen del Amparo. Pero paralelamente, la tradición de recordar a nuestros difuntos se ha visto invadida en los últimos tiempos, no más de diez años, con la manida fiesta de Halloween, donde niños y mayores se disfrazan de muertos, cadáveres y otros espantajos más. Otra americanada más importada, como el puto Papa Noël de las narices, que nada tienen que ver con nuestra tradición cultural.

El mismo día en que miles de jóvenes, disfrazados de mamarrachos recorren las calles de la ciudad, so pretexto de celebrar una botellona, la Tuna de Filosofía y Letras de Sevilla, desde hace más de treinta años, celebra un simpático acto en homenaje a Don Juan Tenorio, consistente en una pseudo-representación de dicha obra -a las puertas de la mítica Hostería del Laurel-, un concurso de sonetos en la recóndita Plaza de Santa Marta, culminando esta loa con la ronda a la estatua de este mito sevillano situada en la Plaza de Refinadores. Cante, algo de cultura y poseía, recorriendo los más bellos rincones del simpar Barrio de Santa Cruz.

Como homenaje a este Tuna de Filosofía y Letras, a la que me siento especialmente unido, y con la que tengo la suerte de compartir la madrugada del día 1 de noviembre, traigo a colación la magnífica poesía que D. Eduardo Maestre dedicó a los niños de halloween.

Dice así:

Niño untado de Halloween, que al verme
me gritas “tuno bueno, tuno muerto”,
como el que le echa un sortilegio a un tuerto,
sin pensar que ello pueda estremecerme.

Qué injusticias tenemos que sufrir:
que la Tuna es residuo del franquismo;
que esta ropa es un anacronismo,
que tendríamos todos que morir…

Niño al uso de Halloween, no insistas:
los Goliardos, cantando a los placeres,
al vino, a Satanás, a las mujeres
no eran precisamente unos machistas.

Ni los sopistas eran reaccionarios,
ni imitaban los modos extranjeros
como haces tú; pues que eran lisonjeros
que camelaban hasta en los seminarios.

Ya andando el Diecinueve, el estudiante
que entraba a formar parte de una tuna
tenía que demostrar, una por una,
de cualquier situación salir triunfante.

Y en la España franquista (la que había),
si eras tuno, quizás eso te hiciera
mil normas sortear, sin que te abriera
un expediente letal la Policía.

Y ahora tú vienes, niño halloweeano,
a corregirme la plana y a insultarme?
Tengo que permitirlo? He de envainarme
la espada? He de callar, parar la mano?

Porque vamos vestidos de esta guisa
(reflejo fiel de decadencia hispana)
tenemos que sufrir de mala gana
tu inoperancia histórica y tu risa?

Niño halloweenés, calabacino
yankificado, aborto yankiforme:
que esto no es un disfraz; que es uniforme
de un soldado de Baco, un libertino!

Llevamos ya mil años canturreando
para poder beber, comer lechuga;
si acaso, un muslo; o si hay Dios, pechuga…
Y ahora nos andan tontos insultando?

Niño de Halloween, dime: en qué descollas?
Cuál es la gracia que tiene tu ombligo?
Ah, que no tienes? Sabes qué te digo?
Gilipollas. Gilipollas... Gilipollas!

martes, 24 de noviembre de 2009

MANUEL GARCÍA, HERMANO MAYOR MACARENO


Tras más de dos meses de continuas informaciones en los medios, cofrades o ajenos, el pasado domingo por fin se celebraron los tan traídos comicios macarenos. A la elección del cargo de Hermano Mayor se presentaban dos macarenos de postín, Manuel García García y Juan José Morillas Rodríguez. Tras el pertinente escrutinio resultó vencedora la candidatura encabezada por Manuel García.

Tengo que decir, al respecto, que amigos míos concurrían en ambas candidaturas, por lo que no ha sido fácil la elección. A Juan José Morillas lo conozco hace muchos años; fue mi Diputado Mayor de Gobierno en mis años de acólito, hasta que un capricho personal de Sainz de la Masa lo cesó en dicho cargo. Él, junto al recordado Francisco Rabanera, se preocuparon de darnos a los acólitos macarenos una formación seria en liturgia, cualidad por la que destacan sobre el resto de los cuerpos de acólitos. He tenido además la suerte de compartir con su hijo Juan José años de Juventud Macarena, con su hija Irene años de facultad y con ambos muchos recuerdos de Cabalgatas de Reyes, algunas pasadas por agua.

Creo sinceramente que Juan José habría sido un gran hermano mayor, pero quizás no sea su momento. Para los que enarbolan que la Hermandad está cada día más cerrada, mi argumento es siempre el mismo. Yo cada vez que me he acercado a ella me han recibido con los brazos abiertos, nadie me miró por encima del hombro, sin ser mi familia una de las destacada/conocidas del atrio macareno, luego me pregunto, ¿acaso, hermano, tú te has acercado por allí?

Y luego está Manuel García. Manuel García y García era el ilustre señor que como concejal por el Partido Popular honró con su presencia la vida política. Manolo García, para los nuestros, los macarenos de toda la vida, es un macareno viejo, que desde el año 1935 viene demostrando su amor por la Virgen de la Esperanza. Hombre cabal, sencillo, sincero, afable, será el encargado de dirigir los designios de nuestra hermandad por así lo ha decidido el senado macareno reunido en cabildo general.

Solo pedirle a nuestros titulares, Ntra. Sra. del Santo Rosario, Ntro. Padre Jesús de la Sentencia y María Stma. de la Esperanza Macarena que sepan guiarle sus pasos, y un único ruego, que jamás se despierte de su sueño mi querido "Niño frito" como viene sucediendo desde hace más de dos siglos.

¡Suerte Manolo, los macarenos estamos contigo!
(Foto by Pasion en Sevilla)

viernes, 20 de noviembre de 2009

UNA FRÍA MAÑANA DE NOVIEMBRE







Alejada del bullicio y la alegría de su procesión de mayo, como si se tratase de una íntimo traslado, asistimos al Rosario de la Aurora de la Pastora de las Almas del Convento de San Antonio de Padua, de la que dicen que su cara fue modelada por el insigne Montes de Oca.

Es esta Pastora una imagen cercana y querida por todos los hermanos de la Bofetá, pues no en vano muchos de ello se enrolaron en sus filas, haya por la década de los setenta, cuando la corporación a punto estuvo de desaparecer de no ser por el empeño y devoción a la Pastora que su incansable hermano y devoto, Fernando Morán Martín, demostró. Él lo era todo, su vestidor y su capiller, su mayordomo y su hermano mayor, montaba su paso y daba sablazos para que a su Virgen no le faltara el culto.

Una fría mañana de noviembre, convocados por nuestro Rafael Gordillo particular, nuestro querido Luis Mi Fajardo, acudimos sus incondicionales, Angelín, Corpitas, Miguelito de Córdoba y un servidor, para acompañarlo y acompañar a la Pastora al emotivo y sencillo rosario que la trasladó este año hasta la Capilla del Carmen de Calatrava, otra hermandad que encierra muchos años de devoción a la Virgen.

Sirvan estas fotografías de recuerdo de aquella entrañable mañana, entre los cánticos del coro de campanilleros, y la compañía de los amigos.

(Fotos by Arte Sacro)

martes, 17 de noviembre de 2009

¡¡¡¡¡GANAMOS!!!!!


Armando Palomino gana las elecciones en el Dulce Nombre

Armando Palomino ha ganado las elecciones a hermano mayor en la hermandad del Dulce Nombre por 27 votos de diferencia al otro candidato Joaquín García-Tapial. Bajo un quorum de 784 hermanos, Armando Palomino García obtuvo 398 votos por 371 la candidatura de Joaquín García-Tapial. En blanco votaron 15 hermanos.

(Texto y foto by Arte Sacro)

Con estas sencillas líneas era comunicado en los medios cofrades la victoria de la candidatura en la que yo concurría en las elecciones de mi Hermandad de la Bofetá. Atrás quedan muchos meses de trabajo, muchas tensiones, insultos recibidos por quien suscribe este texto, de bulos infundados y mentiras intencionadas. Lo peor de todo esto es que, una vez pasadas las elecciones, algunos siguen en el mismo plan, insultando a mi hermano Pepo a través del Tuenti.

Pero prefiero quedarme con lo positivo de todo esto. Para empezar que ni los malos eran tan malos, ni los buenos tan buenos, lección que creo que todos hemos aprendido. Y en lo personal, por primera vez voy a pertenecer a una junta de gobierno en mi hermandad, además en el cargo siempre soñado, prioste. Desde entonces van fluyendo a mi cabeza multitud de ideas de cómo montar los altares de culto, besamanos, pasos...........siempre pensando en engrandecer con mi trabajo los cultos en honor de mis Titulares.
A ellos, a mi Cristo de la Bofetá, al que tengo la suerte de llevar sobre mis hombros desde hace trece años, al Cristo del Mayor Dolor y a María Santísima del Dulce Nombre, la morena más guapa que se ha visto por San Lorenzo, les pido que me den fuerzas para afrontar estos cuatro años, duros e intensos, que me quedan por delante y que sepan guiarme para hacer siempre lo mejor para la Hermandad y sus hermanos.

Por encima de caprichos personales, y como decía el recordado tío Enrique, "ante todo, la Hermandad".

viernes, 13 de noviembre de 2009

MIS PRIMERAS ELECCIONES


No son mis primeras elecciones democráticas, sino la primera vez que concurro a la convocatoria de unas elecciones como integrante de una futura junta de gobierno, en este caso, la que encabeza Armando Palomino García para la Hermandad de la Bofetá.

Conozco a Armando desde pequeño, pues siendo yo muy crío él ya ocupó el cargo de Mayordomo, por lo que algunas de las papeletas de sitio de mi infancia están firmadas de su puño y letra, aunque nuestra relación se hice más fluida y cercana a raíz de nombrarme diputado del primer tramo de Cristo siendo él Diputado Mayor de Gobierno, cargo en el que permanecí seis años, hasta que entré a formar parte de la cuadrilla del paso de misterio de Ntro. Padre Jesús ante Anás.

A lo largo de estos meses, y pese a las críticas y puñaladas recibidas de muchos que creía que eran amigos míos, en los que se ha desarrollado la "campaña electoral" (que poco me gusta este nombre), he podido comprobar quienes de verdad son mis amigos, no los que te pasan la mano por el lomo, sino aquel que, contando con una opinión contraria a la tuya, respeta tu decisión y prevaleciendo la amistad. He soportado insultos por personas de las que jamás creí que las recibiría, pero como hizo nuestro Cristo, jamás he entrado en disputada con nadie, limitándome a callar y poner la otra mejilla.

Hoy, viernes y 13, es el día en que los hermanos están llamados para decidir quien quiere que dirija los designios de la corporación los próximos cuatro años. Si la Virgen del Dulce Nombre y los Cristos del Mayor Dolor y Jesús ante Anás deciden que mi candidatura sea la escogida, prometo en estos años intentar trabajar lo máximo por mi hermandad. En mi seguirán encontrando al mismo hijo de "Rafalito Ríos" que en los 32 años anteriores. Y si pierdo, al día siguiente estaré a disposición de mi Hermandad para ayudar en todo cuanto haga falta. Así nos lo ha inculcado mi padre y es así como actuaré.

Y una última aclaración para los supersticiosos, hoy es día de mal agüero en el mundo anglosajón, no en el cristiano, el mismo mundo que en el día de Todos los Santos visten a los críos de mamarrachos, mientras aquí veneramos al Tenorio y a la Canina de San Gregorio.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

¡ADIÓS CAMPANA, ADIÓS!


Algunos amigos me han comentado que no entendían el símil de mi anterior entrada en el que hablaba de una campana familiar que repicaba en honor de la Reina de Todos los Santos y en recuerdo de su hermano José. Como aclaración a dicha entrada os traigo hoy este pequeño texto que me publicaron en ABC de Sevilla el 9 de abril de 2002, dedicado a la memoria de mi tía-abuela Victoria Delgado Salvador. Quizás en él halléis la respuestas a las dudas. Un saludo y gracias por seguirme.

¡Adiós campana, adiós!

Ayer dejó de repicar para siempre una de aquellas tres campanas. Pocos sabrán que las tres campanas que coronan desde siempre la espadaña de la Basílica de la Macarena, se correspondían con los nombres de la esposas de aquellos entrañables miembros de su junta, que un día, cuando el templo era aún un sueño por realizar, decidieron regalar. Las campanas responden a los nombres de «Ntra. Sra. de los Dolores», «Santa Victoria» y «San Joaquín y Ntra. Sra. del Carmen». Ayer una de las tres subió al cielo para repicar allí, junto a sus hermanos José y Ricardo y junto a tantas y tantas legiones de buenos macarenos, seguros que están de encontrarse ante la presencia de la Macarena del Cielo, que en poco difiere de la de la tierra.

Te fuiste ayer, tu que eras alegre como un repique de campanas en la mañana del Viernes Santo o en el glorioso día de tu solemne Besamanos; pequeña en tu paso, como el repique el Ángelus y buena y fiel, que por algo permaneces asida a tu espadaña por siempre. ¡Adiós campana!, ¡adiós Victoria!..., ¡adiós campana, adiós!

(RÍOS DELGADO, Rafael J. ABC (09/04/2002). Foto by Rafaes.com)

sábado, 7 de noviembre de 2009

MI REINA


Mañana volverá a recorrer las calles de su barrio de la Feria. Es, junto con mi Virgen del Rosario y la Virgen de los Reyes, la trilogía perfecta de devociones letíficas sevillanas. Pero con mi Reina de Todos los Santos todo es distinto.

Supe de Ella porque mi abuelo, José Millán Delgado Salvador, fue inscrito en el cuadrante de hermanos al poco de nacer, lo mismo que hicieron en la Macarena. Cuando un triste mes de noviembre, de hace ya veintisiete años, él decidió subir al cielo a ocupar el palco de los justos, los hermanos de "Tosantos", como les gusta decir a ellos, le rogaron a mi familia porque el vínculo con la Reina de Todos los Santos no se perdiese. Pero, desgraciadamente, aquel ofrecimiento cayó en saco roto.

Por boca de mis padres, aprendí a conocerla y a entender el cariño y la devoción que mi abuelo le profesaba, hasta al punto de que, al regreso de la incruenta guerra incivil, volvió de nuevo a darse de alta como hermano, al haber perecido el archivo corporativo en el incendio intencionado de Omnium Sanctorum.

Recuerdos de mes de noviembre, de frío y abrigo, de cera de un cirial alojado en el bolsillo de una camisa que le cogí prestada a mi padre, de aquellas primeras fotografías realizadas en su Besamanos con la cámara que me regaló Mari Carmen o de conocer los datos de la historia corporativa a través del libro de Juan Martínez Alcalde.

Tuve también la suerte de verla visitar mi casa, cuando en aquellos años en que se procedía a la restauración de su templo procesionó desde la Basílica de la Macarena. Recuerdo con gran pena el primer año, cuando un fuerte aguacero La sorprendió por la calle Bécquer, y en el enfado de mi padre al ver como pronto afloraban los paraguas. Para él si la Virgen se mojaba, nos mojábamos todos. Así se lo inculcarón de pequeño y así nos lo ha transmitido a sus hijos. Fue ese año en el que sufrió un pequeño accidente al romperse el tirante central de la peana, causando un considerable bamboleo a la imagen de la Virgen.

Y recuerdo el gozo del segundo año, de la salida y entrada en la Basílica, tras recorrer buena parte de los barrios de la Feria y la Macarena, mientras Joaquina y Dolores repicaban con fuerza, pero sobre todo, Victoria, repicaba a gloria al tener en su casa a la Reina de Todos los Santos, la devoción de su hermano José.

Pequeños lazos sentimentales me fueron uniendo a Ella, (o tal vez, -seguro estoy de ello,- José desde el cielo se encargaba de hacer los nudos), hasta el punto de que en mi madurez, con mi primer sueldo como profesor, decidí inscribirme como hermano, para compartir el amor y la devoción por la Reina de Todos los Santos.

Desde entonces, en memoria de mi abuelo, un día de novena es aplicada por su alma. Veo en los ojos de mi madre Esperanza el brillo de mi abuelo cuando me sonreía. Y además tuve la dicha de que mi medalla de hermano me la regalase Pilar, la que está llamada a ser la mujer de mi vida.

¿Se puede pedir más? Sinceramente, no lo creo.

(Foto by Amargura y Silencio)

miércoles, 4 de noviembre de 2009

HASTA SIEMPRE JOSÉ LUIS




Cómo todos ya sabremos por los innumerables reportajes emitidos por las diferentes cadenas de TV hace dos días fallecía uno de los actores más populares y entrañables del panorama cinéfilo español.

No fue de mis actores preferidos, pero siempre recordaré su intervención en películas como "La gran familia", "La familia....y uno más" (con el recordado Pepe Isbert gritando por la plaza Mayor de Madrid: ¡¡Chencho!!) o en la saga "La escopeta nacional".

Pero sin duda donde más me impacto verlo fue en las escenas de "La cabina" de Mercero, por lo surrealista de la historia narrada. Un señor se queda encerrado en una cabina de teléfono público de las antiguas -por cierto que en Linares, frente a la fachada de la Casa de la Juventud, resiste una, que ojalá nunca retiren, dado el excaso apego que por el patrimonio tienen en esa ciudad-, cuando se podía hablar porque te aislaba del ruido, no como las actuales que el sonido "envolvente" de las calles te anula por completo.

Y me llamó la atención porque, pese al surrealista planteamiento, mostraba todos los agobios y fobias de una persona. Pensaba en la reacción de mi padre cuando se ha quedado alguna vez encerrado en el ascensor.
Descanse en paz quien ha sido uno de los grandes actores que ha dado España curtido en todos los escenarios posibles, cine, publicidad, televisión, y sobre todo, por las tablas de los escenarios de los teatros.

martes, 3 de noviembre de 2009

DEL DÍA DE LA CONFERENCIA





Os traigo hoy nuevas fotos, realizadas por nuestro buen amigo Adrián Talegón García, del día en que impartí la conferencia en la Hermandad del Cachorro. Quiero, desde estas sencillas líneas, agradecer la excelente y cariñosa acogida que en todo momento me deparó la Hermandad y que me hicieron sentirme como si estuviese en mi propia casa.

Y a los que me acompañaron ese día, amigos y familiares, o quisieron acompañarme pero sus compromisos profesionales se lo impidieron darles también las gracias, pues solo con la intención ya cuenta.

(Foto by Adrián Talegón García)