LOBERA, LA ESPADA DEL REY SANTO

Lobera, espada del Rey San Fernando, Patrón de Sevilla

Relicario de San Clemente. Catedral de Sevilla, donación del Obispo de Scalas; anónimo s. XVI

Retrato del Rey Fernando III de Castilla, Ayuntamiento de Sevilla; anónimo, hacia 1620, óleo sobre lienzo

En la foto superior, grabado publicado en "La Ilustración Española y Americana" en 1884 donde aparece San Fernando con su conocida espada; debajo, Pendón de Sevilla o de San Fernando del Ayuntamiento de Sevillo, donde aparece con la referida presea.

San Fernando, óleo conservado en el Museo de la Real Academia de San Fernando de Madrid donde es plasmado también portando a Lobera, su querida espada

Era Lobera la espada más querida y apreciada por el Rey Santo, San Fernando, Patrón de Sevilla y del Arma de Ingenieros del Ejército de España. La misma es una espada de hoja plana y dos filos, que mide 0,854 m. de largo y 0,053 m. en su parte más ancha, esto es, en la cruceta. Se cree que el nombre le viene por ser una espada usada para la caza, especialmente del lobo, o que se portara con el traje conocido como "loba", aunque no se descarta que este fuese el nombre exacto de la presea, tal como era habitual en la época.

La misma, a su muerte, fue cedida al Infante D. Manuel, hijo menor del citado monarca, tal como éste lo expresó en su lecho de muerte: "Otrosí: Pero non vos puedo dar heredad ninguna, mas dovos la mi espada Lobera, que es cosa de muy grand virtud, et con que me fizo Dios a mi mucho bien". Así aparece recogido en el "Tratado que fizo don Juan Manuel de las armas que fueron dadas a su padre el infante Don Manuel" escrito por Don Juan Manuel de Borgoña y Saboya, sobrino de Alfonso X "El Sabio" y nieto de Fernando III "El Santo", más conocido en el mundo literario como D. Juan Manuel.

Todos los años el 23 de noviembre se celebra una procesión cívica por las gradas y las naves catedralicias donde esta espada es portada por el Alcalde o Intendente de la ciudad, mientras el concejal más joven portal una réplica del Pendón de San Fernando. En esta procesión, que culmina con un Solemne Te Deum ante el altar mayor de la Catedral de Sevilla, el Deán porta bajo palio el relicario que contiene las reliquias de San Clemente, en recuerdo de que en la festividad de dicho santo fue reconquistada la ciudad de Sevilla a los musulmanes.

(Fotos by Wikipedia, blog Leyendas de Sevilla y Cuadernos de Arte e Iconografía)