Paso de Cristo de la Hermandad del Calvario con la imagen del Cristo de la Clemencia de la Catedral de Sevilla, procesionado con motivo de la culminación de las Misiones de 1952. Obsérvese que el paso va adornado con claveles blancos.
Cristo de la Clemencia de la Catedral de Sevilla en la procesión del Corpus Christi de 1923. El paso empleado es el de Santas Justa y Rufina.
No me han gustado las declaraciones de Monseñor Asenjo Pelegrina, por muy Arzobispo de Sevilla que sea, arremetiendo contra la Hermandad de la Esperanza de Triana. Me parece una postura fea, cobarde y soberbia, -pues sabe que desde la corporación nadie osará responderle-, atacar tan frontalmente a una corporación de esta forma de alguien que se supone que es el pastor de nuestra grey. Postura poco o nada conciliadora. Y segunda vez que pincha en hueso contra las Hermandades desde que llegó. Mal empieza.
Estoy cansando de escuchar a muchos sacerdotes quejarse de las Hermandades, quedándose muchas veces en lo superficial, sin pararse a conocerlas más a fondo. Queramos o no queramos la religiosidad popular está encauzada en Andalucía, y sobre todo en Sevilla, a través de las Hermandades. En vez de criticarlas deberían saber aprovecharse ese vivero. Pero parece que solo somos "buenos cristianos" cuando contribuimos al mantenimiento del fondo diocesano común o marcamos con una cruz la casilla de nuestra declaración de la renta.
Habla Monseñor Asenjo desde el profundo desconocimiento de la historia de las Cofradías. Por supuesto que las Hermandades son "asociaciones de públicas de fieles" que se rigen por el derecho canónico, pero cuentan con una parcela de autogobierno, y es a los cofrades que pertenecen a esa corporación a los que les corresponde decidir que se hace. Esto ha sido siempre así, y le recuerdo al Prelado, que en siglos pasados las reglas de una corporación no tenían validez hasta que no recibían el beneplácito del Consejo de Castilla. El ejemplo más claro podemos tenerlo en las órdenes religiosas, que pese a las recomendaciones que reciban del Obispo de turno, deben responder ante su Superior y por último ante el General de su congregación.
La invitación de Asenjo y Rouco Varela a la Hermandad de la Esperanza de Triana era un "caramelito envenenado", en el que seguro que algún dirigente cofrade, habido en pavonearse vara en mano, habría picado. Yo te invito a que vengas pero tú corres con todos los gastos derivados de la organización del viaje, alojamiento y manutención de las personas implicadas, así como el traslado del paso, de las figuras del misterio y del Señor de las Tres Caídas. ¡¡Pues vaya!!; así también invito yo, con dinero ajeno. Conozco a muchos hermanos de la cofradía de la calle Pureza y me hablan de que la broma salía por 100.000€, cantidad nada desdeñable, sobre todo estando en época de crisis, que la Hermandad podrá destinar a las muchas obras de caridad que practica y sostiene.
Es más, si tanto deseo había de que Sevilla estuviese representada en dicho Vía-Crucis, ¿por qué no se ha recurrido a cualquier imagen no procesional de las muchas que tiene y atesora el rico patrimonio artístico de la Diócesis de Sevilla? Le puedo hacer una retahila de advocaciones si quieren, y todas ellas de una calidad artística insuperables: Cristo de la Clemencia de la Catedral, Cristo de los Desamparados del Santo Ángel, Cautivo de San Ildefonso, Cristo de la Misericordia de Santa Isabel, Cristo de las Fatigas o el de Confalón de las Magdalena. Y así un largo etcétera.
Lo que les digo no es nada nuevo. Por dos veces, en 1923 (en la procesión del Corpus Christi) y 1952 (con motivo de la clausura de las Misiones), ha procesionado el Cristo de la Clemencia de la Catedral. La primera vez sobre el paso de las Santas Justa y Rufina y la segunda sobre el paso de Cristo de la Hermandad del Calvario, quien lo cedió para la ocasión.
De hecho lo que comento no es ninguna tontería, pues en el referido Vía-Crucis madrileño van a participar dos imágenes conventuales que no son procesionadas habitualmente, el Cristo Caído con la Cruz de Nicolás Fumo (I. de San Ginés) y el Yacente de Gregorio Fernández (Convento de San Plácido), ambas del siglo XVII.
¿Qué también acuden imágenes de calidad de Murcia o Valladolid, como La Última Cena de Salzillo o La Piedad de Gregorio Fernández? ¡Claro!, pero les recuerdo que en Valladolid el grueso de las imágenes que son procesionadas están expuestas en el Museo Nacional de la Escultura y otro tanto podemos decir de Salzillo. Aquí eso sería impensable, por una razón lógica, y es que, independientemente de su valor artístico, en Sevilla, las imágenes son representaciones de Nuestro Señor Jesucristo y su Bendita Madre, no meras obras de arte.
Lo de Madrid es una pantomima; así de claro. Como afirmaba Antonio Burgos en su columna de ABC hace unos días, esto aquí tiene un nombre, "jugar a los pasitos", porque en las otras Jornadas Mundiales de la Juventud celebradas hasta ahora se ha rezado el Vía-Crucis con una simple Cruz, sin organizar esta parafernalia. De hecho, dudo mucho que el Santo Padre lo haya demandado, pues esta misma idea se podría haber llevado a cabo solo con imágenes de Madrid capital. Me da a mí en la nariz que esto es obra de alguien que aspira a alcanzar mayores cotas de poder y de reconocimiento en la jerarquía vaticana.
Más me preocupa que se vaya a rezar un Vía-Crucis que no se ajusta al que fue remodelado por su S.S. Juan Pablo II en los años noventa, incluyendo estaciones que fueron retiradas -encuentro de Cristo con la mujer Verónica- y obviando la más importante y trascendente de todas -la Resurrección de Cristo-.
Y si a alguien no le gusta lo expresado en esta entrada, lo siento, pero es mi manera de ver el asunto. Cuento y asumo de antemano las críticas que voy a recibir por ello.
(Fotos by Pasionensevilla, Fototeca de la Universidad de Sevilla y Hermandad del Calvario)
A mi me parece bien que se organize un via crucis y que acudan hdads de toda España y que monten una procesión o lo que quieran hacer, no entro en eso, pero si como condición para participar en el evento es que "cada perro se lama su cipotillo" y la broma salga por 100.00e pues sinceramente, muy tontos hay que ser como para gastarse eso en una pantomima de via crucis cuando, como tu bien dices, hay muchas otras cosas de caridad más importantes que lucirse en Madrid...
ResponderEliminarAsí que me parece lamentable que en vez de apoyar la decisión de una de las hermandades que acoge su arzobispado, se dedique a criticarla...
A este hombre lo que le gusta es el lucimiento y ponerse delante de los pasos a soltar el discurso siempre y cuando las cámaras estén presentes, que verguenza de arzobispo...anda y que le den mucho por culo que el Señor de las Tres caidas se queda en Triana ¡¡
AMEN RAFAEL, AS EXPRESADO TODO LAS SENSACIONES QUE ME VENIAN CON ESTE ASUNTO. PERSONALMENTE SOLO PUEDO APLAUDIROS A LOS SEVILLANOS QUE SABEN QUE ANTE ESTO HAY QUE DECIR NO Y LO PEOR ES QUE LO ORGANICE LA MISMA IGLESIA. YO SEGURAMENTE VALLA, TENGO ILUSION DE VER ALGUNA VEZ UN PAPA Y VER PASOS QUE SEGURAMENTE EN SEMANA SANTA RARA VEZ VERE Y ESA CREO QUE SERA LA GRAN DEMANDA PARA LOS QUE VALLAN A DICHO ACONTECIMIENTO. ADEMAS DIGO YO QUE PINTA EN UN VIA CRUCIS LA BANDA DE LAS TRES CAIDAS DETRAS DE SU CRISTO? ESO SERA UN MUNARCO EN LA CALLE.
ResponderEliminarCómo tantas veces ocurre en la cúpula eclesial, Monseñor Asenjo se ha quedado en lo superficial y no ha querido ver lo verdaderamente importante de esa querida Hermandad.
ResponderEliminar¿Falta de eclesialidad (palabra que por cierto no existe)?. Si las hermandades no existiesen si que habría falta.
Un placer pasarme por aqquí.
Yo pensé lo mismo con respecto a si tanto querían una imagen de calidad y de Sevilla, y habiendo tenido el No previo del Cachorro,haber recurrido a cualquiera de las joyas de la Diócesis y sin procesionar habitualmente (Clemencia,Misericordia de Santa Isabel, etc...).
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