Durante 14 años ha sido la carta más esperada en mi buzón después del día de Reyes. Era como el regalo último que culminaba un día perfecto y familiar. Hoy he vuelto a asistir a la igualá del misterio de Jesús ante Anás, de mi Bofetá de mi alma, del que por unos días soñé que era su prioste.
Con la gente consabida, y tras los pertinente besos, abrazos y saludos a los compañeros, asistimos al ritual de la igualá, más cansino que otros años, que se ha prolongado por espacio de cinco horas.
Algunos huecos había, creo que cinco o seis, que han sido convenientemente cubiertos. Con la entrega de la tarjeta con las fechas y horas de ensayo se culmina esta larga espera, que nos pondrá de cara a disfrutar, de nuevo, otro Martes Santo.
Que así sea mientras Jesús ante Anás lo quiera.
Rafaé miarma, seis han entrao na más que entre las 3 primeras.....
ResponderEliminarNo sé cuantos huecos más había, pero no muchos más. Dos en la primera, tres en la tercera, y alguna en cuarta. De quinta para atrás lo que han echo es mover a la gente, a Santi lo han subido a quinta, han bajado a otro a sexta, más uno de séptima que ha vuelto que estaba lesionado.....y poco más.
ResponderEliminarSupongo que a lo sumo ocho huecos, pero reales creo que seis. De todas formas era una valoración que hacía a groso modo.