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Comparativa: mi Niño Frito y el niño del ángel de la guarda
Detalle del niño seise dormido que porta el ángel de la guarda
Ángel de la Guarda; paso procesional de la Virgen de la Salud de San IsidoroEl pasado domingo, con la salida procesional de la Virgen de la Salud y su "Chato de la Costanilla" se iniciaba el ciclo continuado de procesiones de gloria, que tendrá su fin en el mes de diciembre, con la salida de la Pura y Limpia del Postigo.
Paso clásico de gloria donde los haya, siempre me llamó la atención los cuatro arcángeles (San Miguel, San Rafael, San Gabriel y el Ángel Custodio o de la Guarda) que flanqueaban su peana. Dichos antiguos arcángeles dieciochescos, de claro sabor conventual, fueron sustituidos por otros de nueva hechura, tallados, policromados y estofados, obra de Fernando Aguado Hernández, de correcta factura, aunque personalmente me gustaban más los antiguos.
Para el arcángel o Ángel de la Guarda, el cual porta en sus brazos un pequeño niño dormido revestido con el traje celeste de los seises, ciertamente debió de inspirarse en el Niño Jesús dormido que porta en su regazo la Virgen del Rosario de la Hermandad de la Macarena.
Les dejo estas fotografías de muestra para que puedan ver el original parecido de dicha escultura con "mi Niño Frito". Como diría un buen amigo mío ".....del Arco a la Costanilla...". San Gil y San Isidoro unidas a través de una misma imagen.
(Fotos by la hornacina y Rafa Ríos)
Pero si el niño que porta el ángel custodio tiene los ojos abiertos no? cómo sabes que está dormido?
ResponderEliminarPues no lo sé a ciencia cierta, porque por la foto parece que sí. Lo que si se aprecia es que por la mejilla cae una lagrimilla, pero ¿no me negaras la influencia que una imagen ha tenido sobre la otra?
ResponderEliminarEso por supuesto, la inclinación de la cabeza, la posición de las manos y los piés, etc.
ResponderEliminarEstá claro y coincido contigo, en que la influencia del niño Jesús de la Virgen del Rosario en el niño Jesús del ángel custodio es más que evidente.
Es muy curioso la verdad, cuando lo he visto me ha sorprendido bastante.