lunes, 22 de marzo de 2010

DEL PREGÓN DE BARBEITO (Égloga al Costalero)

A mi cuadrilla del Señor de la Sentencia, de la que espero poder formar parte algún día
De obviados a queridos, de odiados y criticados a alabados, de no ser más que un problema para las mayordomías a ser el impulso de muchas Hermandades. Nadie hasta ahora, (quizás solo el Padre Cué en su libro "Cómo llora Sevilla", pero él no fue pregonero) ha cantado, en tan pocas rimas pero tan bien, al Costalero. Gracias Antonio por estos versos, de uno que por sus venas corre sangre cateta, y que ha tenido la suerte de sacar de costalero tu querida Hermandad de Aznalcázar.

Les cabe el equipaje bajo el brazo
Para su larga y dura travesía
La fuerza sacará que no tenía
El músculo. Más nervio y más coraje.
Y el Alma, que sin Alma este viaje
No lo soporta nadie. Nadie iría en ciega galera de una hombría
Remando con los pies en oleaje
De un mar urbano con brillo de cera
Obediente a una voz de seguirella
Y a un golpe de martillo que motiva,
Si al levantar el paso no pensara,
Rebosante la fe, la entrega clara,
Que es Cristo o su Madre quien va arriba....

(Del "unamuniano" pregón de D. Antonio García Barbeito)

1 comentario:

  1. Mírame, Señor y no ocultes tus ojos
    evitándome ver Tu dolor, que aquí estoy:
    necesito aliviar las espinas
    que destrozan tu piel y la soledad
    profunda e hiriente que abre tu corazón.
    Acompaño, sigo y si me permites,
    voy a tu paso. Y para ti, por amor,
    saco fuerzas siempre y te sostengo yo.



    A todas y cada una de las personas que, asociando su sacrificio al de Jesucristo,
    en el mundo del costal, viven la fe. Pasados,
    presentes y futuros. Amén.

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